Sé que para muchos de ustedes este tema no es nuevo y es probable que me hayan oído hablar de esto en más de una ocasión. Sin embargo, hoy quiero tomarme un momento para compartir experiencias y recomendaciones que, en mi opinión, son útiles para todos nosotros. Ya está publicado el calendario ecuestre y muchos ya estamos entrenando a nuestros caballos, así como nosotros jamás dejaríamos que nuestro caballo compitiera si no estuviera preparado, y con un buen estado físico, lo mismo debería pasar con nosotros.
A pesar de hablar constantemente sobre este tema, debo confesar que no siempre he sido la más disciplinada. Odio los estiramientos y me cuesta levantarme para hacer ejercicio. Sin embargo, al darme cuenta de los beneficios que el ejercicio aporta a mi desempeño como jinete, decidí ponerme juiciosa. Nos cuesta aceptar que lo necesitamos, pero he visto a jinetes de salto salir completamente sin aire de una pista, y a otros de enduro incapaces de moverse después de 40 km, pero lo más preocupante es haber visto caballos con dolores de dorso y cojeras causadas por la compensación del mal asiento del jinete.
Ser un jinete completo va más allá de simplemente guiar al caballo. El desarrollo del core proporciona estabilidad, garantizando una postura correcta y evitando movimientos incómodos para el caballo. La flexibilidad, a menudo pasada por alto, favorece una comunicación más sutil y precisa con el caballo, mientras que el equilibrio es fundamental para ayudarlos a ser más precisos y centrados en sus movimientos, liberándolos de la necesidad de compensar nuestro desequilibrio. Y ni hablar de la resistencia cardiovascular, que te ayuda a montar durante más tiempo sin quedarte sin aliento y a tener más energía para concentrarte en tu caballo.
Aunque la recomendación inicial es siempre comenzar con la supervisión de un profesional, entiendo que no todos tienen ese tiempo disponible. En Bogotá, recomiendo el pilates de Marcela Pedraza (les advierto que puede ser tortuoso para los que odiamos estirar y tenemos músculos contraídos) y el entrenamiento en Kona, un lugar que me ha apoyado y ha aprendido lo que necesitamos como jinetes para enforcar de esa manera mis entrenamientos.
Para quienes prefieren quedarse en casa (aunque insisto en la importancia de la supervisión profesional), en Instagram encuentran entrenadores especializados como @jack.equibody.fitness, @rider.movement, @haybales.barbells y @equestrainapp, quienes ofrecen rutinas semanales de ejercicios y membresías mensuales con grupos de jinetes de diferentes lugares del mundo. Además en las aplicaciones GetSet y Ridely, encuentran ejercicios específicos para equitación. No olviden entonces que cuidarnos a nosotros, garantiza también cuidarlos a ellos y poder seguir trabajando juntos en nuestras metas del año.