Por primera vez tuve el honor de ser juez para el FEI World Dressage Challenge y tengo que decir que fue una experiencia maravillosa.
Este evento se originó hace muchos años en la FEI con el motivo de impulsar el desarrollo de las diferentes disciplinas ecuestres en países tercermundistas, a los que nos queda tan difícil viajar a competir internacionalmente con nuestros caballos. Se organizan grupos de países y se compite entre éstos y mundialmente. En el caso de adiestramiento, hay 6 lecciones predeterminadas en diferentes niveles, nos envían un Juez FEI, se organiza un evento al estilo CDI con una Inspección de Caballos, se invitan un Delegado Técnico, un Veterinario y un Steward oficial, y también se escoge un equipo para representar al país. Como cosa especial, la Inspección de Caballos tiene calificación de los jueces (planilla con diferentes puntos sobre el aspecto físico del caballo y práctico de la presentación) y se da un premio al caballo mejor presentado.
La novedad este año es que el evento no se hizo únicamente en la zona centro, como era la usanza. La Comisión Técnica de Adiestramiento de la FEC decidió que era una buena idea compartir este evento entre las tres ciudades, Bogotá, Medellín y Cali, y así se hizo. Como siempre, toda buena intención trae sus problemas: algunos de los días de competencia deben ser laborales, por lo que se sacrifican las posibilidades de inscripción para nuestros jinetes que trabajan y/o estudian. Además, las inscripciones son más costosas que en concurso nacional, por obvias razones. Sin embargo, este evento tiene un complemento educativo que no tienen otros: los jueces hacen una reunión especial para una retroalimentación hacia los participantes, como una mini-clinica donde se da una impresión general y se ven los videos. Para mí, la recompensa educativa de este evento hace un perfecto balance con su costo.
(Premio mejor presentado: Mariana Atehortua, Medellín)
Fue un placer haber invitado a Sandra Hotz, Juez FEI Level 3 de Estados Unidos. Yo la conocía de nombre, pero no personalmente. Nos entendimos muy bien y pasamos una semana muy enriquecedora en todo sentido. Los vuelos estuvieron a tiempo, los hoteles muy cómodos y agradables, la comida más que deliciosa (¡y mucha!). Hay que hacer una mención especial a las tres sedes que nos acogieron con tanta amabilidad: ESUME, Club Campestre de Cali y Club Campestre Llanogrande. La organización impecable en las tres, el personal puntual, efectivo y amistoso; en todo sentido un éxito. ¡Mil gracias!
(Premio mejor presentado: Mariana England, Bogotá)
Para hacer el evento más completo, la FEC organizó también un concurso nacional alterno y tuve la oportunidad de ver muchos binomios que hasta ahora sólo conocía de nombre o por video. Quedé, al igual que Sandy, muy bien impresionada con el material de jinetes y caballos que tenemos en el país. ¡Tenemos un buen presente y un mejor futuro!
(Premio mejor presentado: Camila Uribe, Cali)
Sin duda fue muy emocionante el poder conocer tantas personas con las que he tenido contacto sólo por mensajes o por llamadas telefónicas por haber estado fuera del país por tanto tiempo. Agradezco enormemente el cariño con el que me recibieron.
Queca
